Cada vez es más común escuchar que alguna persona cercana ha sufrido un ataque al corazón. Esto significa cosas diferentes para diferentes personas, puesto que la mayoría entiende que lo ocurrido es un infarto del miocardio, pero en otras ocasiones, se usa el término “ataque al corazón” para la angina de pecho que ameritó unos días de hospitalización para quien lo presenta y en otras se usa para un paro cardíaco.
Con el correr del tiempo se ha perdido el origen de este término, por lo que no se puede definir de donde proviene, pero su empleo es muy frecuente. Los médicos no lo usamos, ya que establecemos perfectamente la diferencia entre la angina de pecho, el paro cardíaco y el infarto del miocardio, por lo que en este texto nos referiremos a este último problema, que es para lo que lo usa la mayoría.
Infarto significa que ha ocurrido la muerte de un tejido, de tal modo que existe el infarto cerebral, el esplénico (en el caso del bazo), infarto intestinal, etc.
De tal manera que infarto del miocardio es la muerte de una parte del músculo del corazón y por eso sólo puede ser agudo, ya que una vez que el músculo muere, se produce una lesión que necesita ser reparada, para lo cual se desarrollará una cicatriz, de tal manera que NO existe el infarto crónico sino que después de la reparación, hablamos de un infarto antiguo.
El periodo de cicatrización tarda unos tres meses en culminar, por lo que la incapacidad laboral, periodo de tratamiento y posibilidad de complicaciones implican un riego importante para el paciente y su familia.
El infarto del miocardio es la principal causa de muerte en nuestro país. En la actualidad, ambos géneros se ven igualmente afectados, de tal manera que antes los hombres ya teníamos al infarto como causa de muerte y las mujeres, que nunca se quedan a la zaga, tienen en la actualidad a las enfermedades cardiovasculares y en particular al infarto como causa más frecuente de muerte, lo que ha motivado varias campañas institucionales, de sociedades cardiológicas y aún en los medios de comunicación contra este grave problema.
Les recomiendo tener mucho cuidado con la identificación de los síntomas. A mis pacientes les aconsejo que identifiquen “signos de alarma de un infarto”: dolor de pecho que se irradia a cuello y mandíbula que dura más de 20 minutos, con sudoración fría, ganas de vomitar o ganas de ir a defecar, así como dolor severo en el pecho, con falta de aire, son todos signos graves de alarma.
Ante esto tome tres tabletas de aspirina infantil y acuda al hospital más cercano pues la primera hora es crucial, con decirles que seis de cada diez personas con un infarto miocárdico, mueren dentro de la primera hora. ¡Ojo, ojo…el 62% de las personas con infarto ni siquiera llegan a un hospital, pues desgraciadamente fallecen en forma súbita, sin recibir ayuda médica.
La mayor desgracia, es que más de la mitad de ellos habían tenido un aviso al menos en una ocasión. Generalmente el aviso es un dolor similar pero de menor duración, lo que llamamos angina de pecho, que es el paso previo al infarto en muchos pacientes.
Afortunada la persona a la que su corazón le avisó, pero muchos de ellos no buscan ayuda a pesar de tener múltiples factores de riesgo para infarto. Esto debe destacarse: si usted es un fumador crónico, aunque sea de pocos cigarrillos al día, sobre todo si padece de presión alta, diabetes mellitus o de colesterol elevado debe buscar ayuda ante cualquier dolor en el pecho.
Aquí sí más vale pecar en exceso y acudir al médico que quedarse en casa para sufrir un infarto y hasta la muerte como les he mencionado.
Dado que el control de nuestro sistema circulatorio es neuro-hormonal y tiene un ritmo a través del día, el infarto es más frecuente por la madrugada y las primeras horas de la mañana.
Me explico: el corazón y sus vasos sanguíneos, las coronarias, dependen de hormonas y sustancias que se elevan en la madrugada por lo que de cada 100 infartos, noventa ocurren a estas horas.
La muerte por un infarto es una muerte eléctrica, puesto que la falta de circulación en el corazón en el momento que se obstruye la arteria con un trombo (un coágulo), produce arritmias muy severas que llevan al paciente al paro cardíaco, de tal manera que si bien existe la ruptura cardíaca, el bloqueo del corazón y otros problemas derivados del propio infarto, es la grave arritmia ventricular producida en los primeros sesenta minutos lo que mata a nuestros familiares.
En el 95% de los pacientes, el trombo se desarrolla en un sitio donde ya existe una lesión obstructiva de ateroesclerosis, es decir ya existe una placa de grasa, dura, que se ha desarrollado a través de varios años, en la arteria del corazón, que al obstruirse impide el paso de sangre, oxígeno y nutrientes al músculo cardíaco que no deja de trabajar hasta que han pasado unos 20 minutos desde la oclusión del vaso y entonces muere.
El tratamiento del infarto agudo del miocardio se los voy a explicar en otra columna, pues es muy complejo y la información que debo entregarles es muy abundante para hacerlo en estas líneas.
Hoy quiero destacar que hay síntomas que les avisan del riesgo de un infarto y que un dolor en el pecho con los síntomas que les he relatado, los debe obligar a buscar ayuda médica eficiente.
Correo: ricardo.jauregui03@gmail.com