» Una grasa que disminuye la grasa en tu sangre

Hay nueva información relacionada con el manejo del eterno villano de la película, el colesterol, que quiero compartir con ustedes en esta Corazonada.

De los 18 millones de personas que mueren en el mundo cada año, por problemas cardiovasculares, un 80% fallece por infarto del miocardio.

Puesto que la mayoría de estas personas sufren del infarto, a consecuencia de tener colesterol alto en la sangre, se requieren políticas públicas y reglas familiares que eviten que el colesterol en la sangre de las personas, se vaya más allá de 200 mg por cien mililitros de sangre, que es el nivel normal.

Por supuesto que es un error considerar al colesterol como un villano exclusivamente, pues es una molécula necesaria para la vida, ya que todas nuestras células lo contienen y no podríamos elaborar sustancias vitales como las hormonas, si no tuviéramos suficiente colesterol.

Los competidores vegetales del colesterol son los fitoesteroles, que son extraordinarios componentes de los alimentos y que te bajan el colesterol y los triglicéridos de la sangre, pues bloquean a nivel intestinal la absorción de las grasas hasta en un 80%. Son componentes estructurales de las células vegetales, ya que se encuentran tanto en las hojas y los tallos como en los frutos.

Son muy abundantes en fitoesteroles las semillas de calabaza, pistaches, almendras, nueces, los aceites de canola, soya, girasol y todos los vegetales amarillos, rojos y verdes.

Se conocen por lo menos unos cincuenta fitoesteroles, que en palabras sencillas son la grasa vegetal. Por eso afirmo, que estamos ante una tremenda paradoja: podemos comer grasa vegetal que te hace eliminar la grasa animal, pues si consumes fitoesterol, eliminas colesterol hasta en un 15%.

Debemos consumir aproximadamente 1.3 gramos al día, algo que podemos alcanzar fácilmente al consumir ensaladas, leguminosas, semillas oleaginosas y aceite comestible como el derivado de canola, soya, oliva y girasol. Todos estos alimentos son ricos en fitoesteroles y debemos consumirlos tres veces al día, si bien hay nuevas noticias: recientemente ha sido lanzado en nuestro país, un aceite de canola adicionado de fitoesteroles, aunque no conozco el porcentaje adicionado, lo que sin duda es un gran logro, pues es el primer alimento que tiene esta característica en México.

Este nuevo aceite, único en su género, permitirá a las personas sanas poder evitar un infarto o una lesión vascular en el cerebro, pero además, los pacientes que ya sufrieron una enfermedad vascular, podrán  evitar un nuevo evento. Eso quiere decir que este aceite tiene propiedades extraordinarias, pues nos permite realizar prevención tanto primaria como secundaria.

Esto nos coloca a nivel de países avanzados que desde hace años comercializan alimentos como margarinas, salsas, aderezos, jugos y aún la leche, adicionados con fitoesteroles.

Nunca debemos olvidar que la ateroesclerosis es una enfermedad sistémica, pues lesiona a todos los vasos sanguíneos. Claro que no sólo es el colesterol alto, es la participación del tabaquismo, de la hipertensión y de la diabetes mellitus, que al conjuntarse provocan lesiones del endotelio, esa capa celular que es como un forro en todos los vasos sanguíneos y que en realidad es un como un órgano productor de miles de sustancias útiles que pasan a la sangre para actuar en todo el cuerpo.

Es impresionante saber, que de acuerdo con la información obtenida a través de la ENSANUT 2012, publicada en noviembre del año pasado, el 14% de los menores de 30 años tienen el colesterol alto en la sangre y que, peor aún, el 46% de los adultos mayores de esta edad, tienen el mismo problema.

Información científica ya publicada y generada en el Centro Médico Nacional, permite identificar que la asociación de los diferentes factores de riesgo para desarrollar ateroesclerosis, es muy frecuente. El 60% de los pacientes con infarto, tienen colesterol alto, la mitad de ellos había fumado, el 40% padecía de hipertensión arterial y una cifra similar tenía diabetes.

Estas cifras son compatibles con las de la encuesta nacional que ya les mencioné, pues ha quedado perfectamente claro que estos factores de riesgo han aumentado a través de los años, por lo que cada vez, vemos más infartos en México en pacientes de todas las edades.

En relación a este punto, les comparto una información que muestra la tendencia que tenemos en México, a sufrir de infarto a una edad menor. Resulta que en 1984 realizamos un estudio que demostró que por cada 100 pacientes con infarto, había sólo 6 pacientes menores de 40 años, pero veinte años después esta cifra había aumentado a 18 pacientes, es decir los jóvenes se infartaban tres veces más que antes. La causa directa era su colesterol elevado en sangre y la participación de los  factores de riesgo que les he mencionado, sobre todo el tabaquismo y una pésima alimentación.

De hecho, la comida chatarra invadió nuestro país en esa época, donde ya teníamos un alto consumo de grasa animal. Las pizzas, hamburguesas y hot dogs se añadieron a las carnitas, las tortas cubanas, la birria y la barbacoa, por lo que necesitamos sustituir alimentos por otros más sanos. Mucha gente piensa que la cocina saludable es desagradable y puedo asegurarles que de ninguna manera es así.

Hace poco les compartí en La Corazonada los beneficios de la dieta mediterránea y cualquiera de ustedes que la pruebe estará más sano y sin duda alguna, la va a disfrutar. Muchos de los beneficios que esta dieta proporciona, son debidos a su alto contenido de anti oxidantes y fitoesteroles.

El vino proporciona flavonoides y resveratrol, el pescado y las semillas oleaginosas te dan aminoácidos y ácidos grasos esenciales (los famosos omegas) y las verduras, leguminosas y ensaladas te proporcionan fitoesteroles. Si añades a esto, que ahora cuentas con un aceite de canola adicionado en fitoesteroles, es obvio que puedes gozar de alimentos fritos sin sentir culpas, todo lo contrario, estarás comiendo muy sano y sabroso.

 Mail: ricardo.jauregui03@gmail.com

Hasta la próxima.