» Pierde Gordillo amparo vs ISSSTE

Para molestia de la profesora Elba Esther Gordillo, un juez rechazó la petición de amparo promovida por la Federación Democrática de Sindicatos de Servidores Públicos (FEDESSP), en contra de la determinación de otro juez que le había negado a la organización dos asientos más en la Junta Directiva del ISSSTE.

La resolución de ayer pone punto final, al menos en el ámbito jurídico, a un juicio de más de cinco años promovido por la FEDESSP para obtener dos lugares más en la Junta Directiva.

La Junta Directiva del ISSSTE se compone de 18 integrantes: nueve son representantes del gobierno federal, (Hacienda, Salud como cabeza de Sector, la Función Pública, Banco de México, Sedesol, entre otros) y nueve son representantes sindicales.

De esos nueve, cuatro lugares fueron asignados al Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), cuatro a la Federación de Sindicatos de Trabajadores al Servicio del Estado (FSTSE), cuyo dueño es Joel Ayala y el lugar que resta fue asignado a la representación de los sindicatos universitarios.

Gordillo promovió, a través de la FEDESSP, un juicio para tratar de obtener dos lugares más en la Junta Directiva, pero el juez que llevó el caso determinó que la Federación de la maestra estaría sobrerrepresentada porque en los hechos ya tiene cuatro asientos con el SNTE.

La FEDESSP se inconformó con este fallo, solicitó un amparo pero el miércoles pasado el juez del Primer Juzgado de Distrito en Materia de Amparo rechazó la solicitud.

Esa es la razón jurídica.

En las consideraciones políticas, en el gobierno federal existía el temor de que Gordillo ganará pues eso le habría dado la mayoría de la representación sindical en la Junta de Gobierno del ISSSTE, lo que habría puesto contra las cuerdas a la dirección del Instituto.

¿Qué es lo que habría que rescatar del encuentro ayer entre legisladores y el grupo de ciudadanos víctimas colaterales de la guerra contra la delincuencia organizada?

Quizá la aceptación de casi todos los partidos –excepto el PRI-, de su responsabilidad en la apatía legislativa para aprobar la reforma política y la Ley de Seguridad Nacional.

Quizá las disculpas –excepto la del PRI- que ofrecieron los representantes del PAN, PRD y Verde Ecologista; quizá las promesa de que sí habrá reformas –aunque no dijeron cuando- y hasta una partida presupuestal para apoyar el movimiento por la paz, lo cual no se sabe si es o no una buena noticia porque cuando hay dinero las pasiones se desatan.

El grupo de ciudadanos, encabezado por Javier Sicilia, salió con compromisos de palabra, es decir, como vinieron.

Pero lograron que el país volviera los ojos nuevamente a su movimiento.

¿Perdón? Tal vez. Pero no olvido.