>La guerra que ha comenzado el PAN en contra de Enrique Peña Nieto y sus incumplimientos de las obras prometidas en el estado de México, tendrá una respuesta de la misma intensidad.
En el PRI trabajan para desvirtuar la campaña panista con la que se pretende mostrar a un Peña Nieto “que no cumple, mentiroso”, pero también para documentar el fracaso de las administraciones panistas, a nivel federal y estatal, por hacer de este un país mejor.
El primer asunto será atizar fuerte el asunto de las contradicciones y supuestas mentiras entre el gobierno federal y la candidata Josefina Vázquez Mota en el asunto de los pisos firmes.
El PRI documentó la semana pasada que las cifras ofrecidas por la candidata presidencial no correspondían a los informes ni de Vicente Fox ni de Felipe Calderón.
Pero en breve se cuestionarán asuntos como la cifra de empleos creados –en las que no hay acuerdo entre el INEGI y el gabinete económico-, en el número de empresas cerradas a causa de la violencia y en el deterioro general del poder adquisitivo de los salarios, entre otros.
Un tema que será base de la contracampaña tricolor será el aumento de los mexicanos en pobreza alimentaria y patrimonial, que fue una de las responsabilidades de Vázquez Mota durante su gestión como secretaria de Desarrollo Social.
Todo esto calentará, sin duda, los días previos al primer debate programado para celebrarse el 6 de mayo próximo.
Pero si, efectivamente, la estrategia del PRI será no dejar pasar un solo ataque sin respuesta.
Golpe por golpe, pues.
>El fin de semana pasado, durante una gira por el norte de Veracruz, nueve presidentes municipales del PAN, PRT, PT, PANAL y Convergencia -hoy Movimiento Ciudadano- se sumaron al proyecto del priista Peña Nieto.
Los nombres de los neopeñistas son José Mora Eligio, de Santiago Ixmatlahuacán (PANAL); Rutilo Espinoza Pérez, de Chumatlán (PT); Samuel Hernández Cruz, de Ixhuatlán del Sureste (PRD); Luis Casas García, de Landero y Coss (Convergencia, hoy Movimiento Ciudadano); Luis Cabrera Salamanca, de Miahuatlán (PRD); Federico Juárez Ramírez, de Tilapán (PRD); Lucio Juárez Velásquez, de Atzacán (PRD); Cristóbal Hernández Ramírez, de Las Vigas (PRD); y Gaudencio Hernández Arriaga, de Acajete (PAN). También se unió Juan Carlos Krauzze Rivera, ex secretario general del PRD en Veracruz.
Cierto, son municipios pequeños pero de que la deserción luce, luce.
>Una reunión entre el candidato del PRD a la gubernatura de Tabasco, Arturo Núñez Jiménez con Gustavo Rosario, asesor del gobernador –es un decir, lo de gobernador no de asesor-, Andrés Granier, generó entre los priístas tabasqueños la impresión de que Granier le está jugando las contras a Jesús Alí de la Torre.
Granier no pudo imponer a Humberto Mayans, pimero, y luego Luis Graham por lo que no le quedó más que aceptar la candidatura de Alí.
Pero, ¿a poco el gobernador (?) ya cambió de camiseta porque no le ve patas para gallo a Alí?