>Desde la casa presidencial se ordenó salir con la información clara y oportuna para evitar dejar vacíos que suelen llenarse con rumores y especulaciones.
Y es que para los mexicanos, acostumbrados a practicar “el sospechosismo’’, la explosión en la Torre de Pemex, que hasta el cierre de este espacio, ha costado la vida a 15 personas y dejado a una centenar de heridos de diversa gravedad, “no es casualidad’’.
No lo es porque ocurre justo en el momento en el que se reinicia el debate sexenal sobre la modernización del sector energético, cuya joya emblemática siempre es Pemex.
El hecho ocurre también cuando se preparaba una magna conmemoración de los 75 años de la expropiación petrolera, que ocurriría el 18 de marzo próximo, y que seguramente habrá de cambiar drásticamente a la luz de este hecho.
Cierto que el gobierno federal no ocultó ni minimizó los hechos; salió a declararlo en voz del secretario de Gobernación, Miguel Osorio Chong, habilitado como el único vocero.
Pero la causa que provocó el accidente –hasta ahora tiene ese calificativo-, no fue revelada por que, según explicó el mismo secretario de Gobernación, no era posible llegar hasta donde se originó la explosión para determinar ayer mismo qué y cómo fue posible que se desplomaran dos pisos de la emblemática torre de la paraestatal.
Sin embargo, la presencia del propio presidente Enrique Peña Nieto en el lugar, junto con al Procurador General de la República, el secretario de Gobernación y el Jefe de Gobierno del DF, alentaban cualquier cantidad de versiones sobre el origen de la explosión.
Habrá que esperar una semana para conocer el peritaje oficial.
Por lo pronto, la versión que con más fuerza se manejó ayer entre los funcionarios de alto nivel presentes en el edificio, fue la explosión de dos subestaciones de energía eléctrica que alimentaban la torre.
Que no cunda el sospechosismo.
>LOZOYA DE REGRESO
Miguel Osorio Chong comía con el Consejo Directivo de la Cámara Nacional de la Industria de la Radio y la Televisión, encabezada por Tristán Canales Najjar, cuando fue notificado de la explosión en la torre de Pemex.
El hidalguense apuró el plato fuerte y se disculpó para poder atender la emergencia.
Desde casi las cuatro y media de la tarde llegó al lugar y estuvo allí hasta que se tuvieron cifras reales de los daños para salir a dar a la información a los medios.
Y tuvo que ser Osorio, porque el director de Pemex, Emilio Lozoya Austin, fue el único funcionario que no se vio porque se encuentra en China, después de haber participado en el Foro Económico de Davos.
Ya lo regresaron.
>PEÑA EN LA CONAGO
El gobernador de Chihuahua, César Duarte Jacques, anunció que el próximo 18 de febrero los gobernadores del país se reunirán con el presidente Peña Nieto en el marco la XLIV Reunión Ordinaria de la Conferencia Nacional de Gobernadores (Conago).
Esta será la primera vez, en años, que un jefe del Ejecutivo se reúne con los gobernadores.
La última vez ocurrió en el 2001, cuando la Conago tenía realmente fuerza y se reunieron con Vicente Fox Quesada para acordar los términos de …¡la reforma hacendaria!
Si, se realizó un amplísimo documento, ambicioso como todos, pero nomás no pasó nada en 12 años. A ver si ahora sí.
>COSA JUZGADA
A pesar de que la liquidación de Luz y Fuerza del Centro es cosa juzgada, el líder de lo que queda del SME, Martín Esparza, anunció que pedirán juicio político contra los magistrados de la Segunda Sala de la Corte que le apagaron la luz. No pararán.