
La cumbre entre Estados Unidos y Rusia tomó lugar en Alaska este viernes 15 de agosto; los presidentes Donald Trump y Vladimir Putin se reunieron en la base militar Elmendorf-Richardson de Anchorage para discutir temas relacionados con la guerra en Ucrania y su posible “acuerdo de paz”, así como para alcanzar un trato sobre el control de armas nucleares entre las naciones.
Este encuentro que duró aproximadamente seis horas, sucedió tras incesantes esfuerzos de Trump por frenar el conflicto con Kiev, pero no solo eso estaba en la mesa; la posibilidad de “reivindicarse” frente a Europa de Putin, y aquella presunta expectativa por el Nobel de Trump, representaban un importante papel en la reunión, pero ¿lo consiguieron? MILENIO te cuenta.
¿Cómo se desarrolló la cumbre?
El encuentro, ocurrido en lo que en su momento sirvió de defensa a los estadunidenses contra las amenazas de la Unión Soviética durante la Guerra Fría, la base Elmendorf-Richardson, en la actualidad ponía en ventaja al líder ruso, afirmaban expertos.
La reunión comenzó con “cara a cara” entre los presidentes que se alargó más de lo esperado, continuó con un desayuno de trabajo en el que estuvieron presentes la delegación rusa y miembros del gabinete norteamericano, y culminó con la rueda de prensa. Esta última dejó ver que Trump y Putin llegaron a un buen puerto.
Junto a Putin estuvieron los ministros rusos de Exteriores, Serguéi Lavrov; el de Defensa, Andréi Beloúsov y el de Finanzas, Antón Siluánov, junto al enviado del Kremlin para cooperación económica con Estados Unidos, Kiril Dmítriev. Además del asesor de política internacional, Yuri Ushakov.
A Trump lo acompañaron el secretario de Estado, Marco Rubio y el embajador Steve Witkoff, el secretario del Tesoro, Scott Bessent; el secretario de Comercio, Howard Lutnick; el secretario de Defensa, Pete Hegseth, y la jefa de gabinete, Susie Wiles.
¿Qué acordaron los presidentes?
La conferencia de prensa comenzó con Vladimir Putin expresando la buena relación que tiene con Estados Unidos, en comparación con el gobierno estadunidense anterior. El líder ruso expresó que si Trump hubiera estado en el poder durante 2022, “la guerra no existiría”.
“Espero que los acuerdos de hoy sean el punto de partida no solo de los problemas ucranianos, sino que también ayuden a restablecer las relaciones comerciales y pragmáticas entre Rusia y Estados Unidos”, declaró Vladimir Putin.
Lo que denominaron como “una de las mejores reuniones de la historia”, fue sumamente productiva, declararon. Además de aclarar que sólo “algunos temas” quedaron por tratarse, aunque el primordial, un acuerdo tajante sobre el conflicto armado en Ucrania, fue uno de ellos.
El presidente Trump expresó que realizará llamadas con los miembros de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) y por supuesto, al mandatario ucraniano Volodimir Zelenski.
“En última instancia, la decisión no es mía”, expresó el republicano.
(milenio.com)