» Jodi Arias, condenada a cadena perpetua tras largo juicio en Arizona

Phoenix.- Jodi Arias fue sentenciada hoy a cadena perpetua sin libertad condicional por el homicidio de su novio en junio de 2008, lo que viene a poner fin a uno de los juicios más largos y costos en la historia de Arizona.

Sherry Stephens, magistrada de la Corte Superior del Condado de Maricopa, en Phoenix, impuso la sentencia este lunes y condenó a la acusada a pasar el resto de sus días tras las rejas, al negar la opción de la libertad condicional.

“Estoy horrorizada por lo que hice y me gustaría que hubiera alguna manera de que pudiera regresarlo”, dijo Arias a la magistrada poco antes de que fuera emitida la sentencia.

Arias expresó su deseo de ser sentenciada a la pena de muerte, pero señaló a la juez que eso sería injusto para su familia y sus amigos.

En 2013 Arias, de 34 años, fue declarada culpable del asesinato de su amante, Travis Alexander.

Alexander, de 30 años, fue encontrado muerto en el baño de su casa en Mesa, un suburbio de Phoenix, en junio de 2008. Su cuerpo tenía un disparo en la cabeza, pero también recibió unas 30 puñaladas y además fue degollado.

Tras el homicidio, amigos de la víctima señalaron a Arias como la principal sospechosa del crimen. Fotos explícitas recuperadas de una cámara digital encontrada en la casa de Alexander mostraron que el homicidio se produjo después de una cita entre ambos.

Arias y Alexander se habían tomado las fotografías desnudos en la cama y ella había tomado fotos de él en la ducha, donde fue encontrado su cuerpo. Una fotografía incluso mostraba su cuerpo ensangrentado en el piso.

El juicio contra Arias en 2013 despertó la atención nacional desde un inicio, con un público atraído por los elementos de sexo, juventud y crueldad. El proceso fue transmitido en vivo a través de Internet y comentado ampliamente en las redes sociales.

Arias fue declarada culpable de asesinato en primer grado, pero el jurado que la condenó no pudo llegar a un veredicto unánime sobre la conveniencia de sentenciarla a la pena de muerte o cadena perpetua, por lo que había dejado su sentencia pendiente.

Un segundo jurado fue convocado con ese propósito y, de manera similar al primero, luego de múltiples deliberaciones no pudo llegar a un acuerdo sobre la sentencia que debería imponérsele a la acusada.

Finalmente este lunes, luego de una tercera ronda de semanas de testimonios por parte de la defensa y la fiscalía, la magistrada Stephens dictaminó la sentencia de cadena perpetua sin libertad condicional, siete años después de que haberse cometido el homicidio y luego de que el costo del proceso alcanzó varios millones de dólares.