
El fentanilo contaminado que causó 68 muertos confirmados en Argentina, pero que pueden ser más, sacó a la luz un entramado societario alrededor de HLB Pharma Group, el laboratorio que produjo el medicamento, según la investigación judicial puesta en marcha tras la tragedia sanitaria.
Dos lotes de fentanilo contaminado con dos bacterias multiresistentes, comercializados por HLB Pharma, causaron en los últimos meses al menos 68 muertos y 19 infectados, distribuidos en las provincias de Santa Fe, Buenos Aires y Córdoba, además de la capital argentina.
El fentanilo, un potente opiáceo sintético usado como analgésico para tratar dolores intensos y anestésicos, fue administrado a pacientes en unidades de cuidados intensivos de una veintena de centros de salud argentinos.
En una investigación sobre varios de estos fallecimientos, inicialmente atribuidos a paros cardiorrespiratorios, se detectó la presencia de las bacterias Ralstonia pickettii y Klebsiella pneumoniae en ampollas de este medicamento que habían sido suministradas a pacientes.
El caso es investigado por el Juzgado Criminal y Correccional Federal N° 3 de La Plata, capital de la provincia de Buenos Aires, y está a cargo del juez Ernesto Kreplak.
Este magistrado impulsó en mayo medidas orientadas a recuperar los lotes que seguían circulando para evitar las muertes e intentar determinar el daño total, ya que todavía es incierto.
Las muertes en el país por Fentanilo contaminado de HLB PHARMA GROUP al día de hoy son 51 sobre 98 casos estudiados. NUNCA CITARON A INDAGATORIA AL DT O AL DUEÑO ? pic.twitter.com/20BzryLvqp
— Dr. Claudio Zin (@ZinClaudio) June 25, 2025
“Un entramado societario complejo”
La investigación judicial ha revelado “un entramado societario complejo que abarca numerosas actividades comerciales –muchas de ellas no relacionadas entre sí- y que, a esta altura del proceso, permiten suponer el despliegue de maniobras tendientes a evadir y/u ocultar posibles conductas ilícitas”, detalla el dictamen que inhibió de sus bienes a los investigados y al que tuvo acceso EFE.
El entramado societario identificado se teje alrededor de las firmas que elaboraron, comercializaron y distribuyeron el producto; y de su principal titular, Ariel García Furfaro. En total, son nueve las firmas involucradas.
También figuran como sospechosos en la causa (que todavía no tiene imputados) familiares de García Furfaro que aparecen como titulares de HBL Pharma Group, así como responsables del proceso productivo de las distintas firmas.
Entre los investigados está Jorge Salinas, quien, según Pablo Javkin, querellante e intendente de la ciudad de Rosario, es accionista de una de las empresas que producían la droga para HBL Pharma y socio de García Furfaro en la compra del laboratorio Apolo, donde en 2016 se registró una explosión con el resultado de cinco heridos.
Durante la investigación, se realizaron 22 allanamientos, en los que confiscaron dispositivos electrónicos, documentos, un arma de fuego y 29 palets con medicamentos en un camión perteneciente a una empresa de alimentos, según fuentes judiciales.
Las fuentes precisaron a EFE que todos los sospechosos tienen prohibido salir del país, además de sus bienes inhibidos y una investigación patrimonial abierta.
Los antecedentes del laboratorio
El caso del fentanilo contaminado se conoció en abril, cuando el Hospital Italiano de La Plata detectó un brote inusual de infecciones respiratorias en pacientes internados en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI), que luego fueron asociadas a las bacterias Ralstonia pickettii y Klebsiella pneumoniae.
Dos años antes, la infectóloga Florencia Prieto, de la ciudad de Concordia, en la provincia de Entre Ríos, había denunciado la presencia de Ralstonia en un medicamento de HLB Pharma, tras detectar anomalías en la evolución de sus pacientes.
“Tuvimos que indagar qué pasaba con estas pacientes en cada etapa del tratamiento para ver qué estábamos haciendo mal. Llegamos a la conclusión de que lo único que todas tenían en común era la administración de dos medicamentos. Mandamos ambos a analizar y en las ampollas de dexametasona de HLB Pharma creció la Ralstonia”, explicó a EFE Prieto.
La médica retiró los lotes infectados de circulación y los remitió con la denuncia correspondiente a la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT). Poco después, recibió una respuesta del organismo: “El producto reunía las condiciones correctas”.
“Se podría haber evitado”
Sobre la actual crisis del fentanilo contaminado, Prieto afirmó: “Si ANMAT hubiese intervenido como corresponde en ese momento, se hubiese podido evitar lo que está sucediendo ahora”.
Los hechos de 2023 en Concordia no fueron un episodio aislado, ya que ANMAT ha abierto hasta 267 expedientes a HBL Pharma, de los cuales 117 corresponden a “desvío de calidad” en la producción de medicamentos e insumos médicos”, confirmaron a EFE fuentes judiciales.
En febrero de 2025, antes de los fallecimientos por el fentanilo y tras recibir denuncias contra la empresa, ANMAT bloqueó la producción del laboratorio por “deficiencias significativas, clasificadas como críticas y graves, en la gestión del sistema de calidad farmacéutico”.
Pero eso no impidió que los lotes de fentanilo ya elaborados llegaran a distintos centros médicos de Argentina.
Una vez desatada la crisis, en el mes de mayo, ANMAT prohibió el uso, distribución y comercialización en todo el país de los productos registrados a nombre de HBL Pharma.
El organismo, además, elaboró una lista de violaciones por parte de la empresa a indicaciones y medidas, muchas relacionadas con el incumplimiento de buenas prácticas en la elaboración de medicamentos.
“Se debió adoptar una actitud más severa con estas empresas para que no sucediera esta desgracia”, manifestó a EFE Adriana Francese, abogada de los familiares de fallecidos por el fentanilo contaminado y que exigen justicia.
(milenio.com)