
El fraude fue uno de los delitos que más repuntó en el contexto de la situación de emergencia por coronavirus. Durante el primer trimestre de este año, el estado de Puebla acumuló mil 065 carpetas de denuncias por este ilícito.
El dato representó un aumento de 118.2 por ciento con relación a igual lapso de 2020, según cifras del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP).
De acuerdo con el informe sobre incidencia delictiva del SESNSP, Puebla se sitúa entre los seis estados del país con más carpetas de investigación abiertas por actos ilegales que realizan una o varias personas para obtener un beneficio afectando a otras, empresas o instituciones.
Solo en enero de este año, se contabilizaron 301 averiguaciones por fraude, mientras que en febrero la cifra subió a 340 y en marzo sumaron 424 denuncias, por lo que el primer trimestre cerró con un total de mil 065 casos.
Este dato es el más alto reportado en denuncias sobre fraude para el caso de Puebla en los últimos cinco años.
De acuerdo con los datos presentados por el Sistema Nacional de Seguridad Pública, el fraude fue uno de los ilícitos que más incrementó respecto a los delitos que atentan contra el patrimonio.
Este ilícito rebasa las carpetas iniciadas por abuso de confianza, extorsión, daño a la propiedad o despojo.
En ese contexto, representantes del sector privado en Puebla han denunciado diferentes casos de estafas, desde inmobiliarios que alertan por supuestos propietarios que ofrecen casas y departamentos en renta, cuando en realidad la vivienda no existe o no son dueños de los bienes, hasta firmas financieras legalmente constituidas que advierten por suplantación de identidad afectando a usuarios que requieren algún crédito.
(milenio.com)