El presidente Andrés Manuel López Obrador informó que la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), la Guardia Nacional, la Marina Armada (Semar) y la Fiscalía General de la República (FGR) ya se encuentran atendiendo a la población de Texcaltitlán, Estado de México, luego del enfrentamiento entre pobladores e integrantes de la Familia Michoacana, el cual dejó hasta 14 personas sin vida.
“Ya está la Guardia Nacional”, dijo este sábado el presidente Andrés Manuel López Obrador a reporteros al término de un encuentro con simpatizantes y beneficiarios de programas sociales en Tejupilco, Estado de México.
Previamente, la gobernadora del Estado de México, Delfina Gómez, expresó su gratitud por el apoyo brindado a las corporaciones de seguridad. Además hizo un llamado a la unidad y participación ciudadana para alcanzar la ansiada paz en el estado.
“Agradezco a la Secretaría de Seguridad, Sedena, GN, Marina, Fiscalía y a todos los que integran seguridad por los apoyos que nos han dado sobre los hechos lamentables en Texcaltitlán.
“Todos unidos fortaleceremos la seguridad y la paz que tanto anhelamos los mexiquenses”, declaró en su discurso ante el Presidente.
La gobernadora hizo hincapié en que la construcción de un entorno más seguro no solo depende de las acciones gubernamentales, sino también de la colaboración activa de la ciudadanía, e invitó a la población a unirse al esfuerzo colectivo para lograr un cambio.
“Esta tarea no puede ser llevada a cabo solo por el gobierno, sino también requiere la participación del pueblo. Por eso, los invito a unirse a nosotros y ser parte de este cambio.”
En su discurso, López Obrador hizo énfasis en el peligro que representa el consumo de drogas, y comparando la situación con Estados Unidos, donde el fentanilo causa 100 mil muertes al año.
En este contexto llamó a combatir la delincuencia atendiendo las causas para evitar que los jóvenes sean reclutados.
“Primero seguir combatiendo la delincuencia pero combatir la delincuencia atendiendo las causas; que no recluten los delincuentes a los jóvenes que les cueste trabajo porque los jóvenes ya no quieren esa vida porque esa no es vida y por eso todos los programas de Bienestar.
“Y lo otro es que ayudemos todos a que no haya consumo de drogas porque cuando hay consumo de drogas como es el caso de Estados Unidos ya es muy difícil enfrentar el problema nosotros tenemos ya probado que donde hay más consumo es donde tenemos más homicidios”, apuntó.
Destacó la importancia de la unidad familiar en la cultura mexicana como principal institución de seguridad social, y advirtió sobre el peligro de la desintegración familiar.
“Para que no los enganchen y no se los lleven a las filas de la delincuencia que tengan posibilidad de salir adelante haciendo el bien sin que se vean empujado a tomar el camino de las conductas antisociales hay que cuidar mucho mucho ese aspecto el que la familia se mantenga junta”, subrayó.
Al abordar el tema de la inseguridad uso el ejemplo de Guanajuato, dónde dijo, “las bandas se pelean a los consumidores”.
“Ni siquiera el consumo está o el problema de la drogadicción y de la violencia está en todo el estado; no está en el medio rural no sé los pueblos pequeños están en todo el corredor industrial de Guanajuato y ahí tenemos muchos asesinatos fundamentalmente por el consumo porque las bandas se pelean a los consumidores y se enfrentan.
“Y por eso los homicidios nosotros tenemos que procurar por eso hablo de este tema que no se incremente el consumo de las drogas estar muy pendientes de eso y estar atendiendo siempre a los jóvenes, cuidando a los jóvenes”, dijo e hizo hincapié en la necesidad de atender las causas y prevenir el aumento del consumo de drogas.
López Obrador cerró su discurso con un llamado a mantener la unidad y cuidar a los jóvenes, reiterando que la transformación continuará y agradeciendo a Tejupilco por ser testigo de esta etapa de su gobierno.
Finalmente, retomó su discurso de la ‘Revolución de las Conciencias’ que impulsa con la llamada cuarta transformación, destacó aspectos de la economía, remesas de paisanos, y el trabajo de ingenieros militares en la construcción de sucursales del Banco del Bienestar.
De cara al cierre del sexenio, garantizó que el relevo presidencial asegurará la continuidad de la transformación.
“Pero no tenemos porque preocuparnos de nada yo no quiero ser hombre fuerte, no quiero que haya maximato, no quiero ser caudillo mucho menos quiero ser casi que saben además no hay que tenerle mucho apego ni al poder y el dinero”, acotó.
(milenio.com)