» PAN propone elevar a 16 años de cárcel penas por extorsión con violencia

El senador panista José Erandi Bermúdez presentó una iniciativa de reformas al Código Penal Federal para aumentar las penas por el delito de extorsión y castigar ese delito hasta con 16 años de cárcel cuando se cometa con violencia o intimidación.

Subrayó que el tipo penal no incluye actualmente el perjuicio moral y psicológico que provoca, además de que las sanciones de dos a ocho años de prisión y de 40 a 160 días de multa previstas por la ley no han sido suficientes para inhibirlo.

Bermúdez propuso por ello reformar el artículo 390 de del Código Penal Federal para imponer de cuatro a 16 años de prisión y de 200 a 800 días de multa “al que sin derecho obligue a otro a dar, hacer, dejar de hacer o tolerar algo, obteniendo un lucro para sí o para otro, o causando a alguien un perjuicio patrimonial o moral con violencia o intimidación”.

La iniciativa turnada a las comisiones unidas de Justicia y de Estudios Legislativos para su dictamen considera necesario establecer sanciones más severas para la extorsión, pues las víctimas son forzadas a actuar de determinada forma o entregar algún bien, con base en el temor a que les suceda algo a ellas o a su familia.

“Ello afecta no solo su patrimonio, sino su tranquilidad y sus relaciones interpersonales, debido a que el miedo generado los obliga a hacer cambios muy drásticos, además que, en muchos casos la psicosis es permanente”, alertó el legislador.

Bermúdez señaló que, con base en la Encuesta Nacional de Victimización y Percepción sobre Seguridad Pública 2017, la Iniciativa Global contra el Crimen Organizado Transnacional reportó que en México se registraron 6.6 millones de actos de extorsión.

Lo anterior se traduce en una tasa de 7 mil 719 casos por cada 100 mil habitantes, y 93.2 por ciento de los casos se comete por teléfono.

Subrayó así la necesidad de asegurar una legislación apropiada que no solo proteja la libertad, la tranquilidad psicoemocional y la dignidad humana, sino también la vida misma y, en consecuencia, la estabilidad de toda una sociedad.

​(milenio.com)