La fracción del PRD en la Cámara de Diputados instó a la Comisión Nacional del Agua (Conagua) a presentar un plan extraordinario para la atención, seguimiento, mitigación y prevención de la sequía que se ha extendido a 80 por ciento del territorio nacional.
Por conducto de su vicecoordinadora, Elizabeth Pérez, la bancada perredista subrayó que, ante la inminente crisis hídrica en México, es urgente desarrollar y fomentar mecanismos, políticas públicas y obras necesarias para atenuar la falta de agua y garantizar el derecho humano a ese recurso, como lo establece el artículo 4 constitucional.
“El mundo y México padecen una grave crisis del agua, pues una cuarta parte de la población mundial padece estrés hídrico y la problemática en nuestro país es de gravedad, al grado tal que la Comisión Interamericana de Derechos Humanos expresó su preocupación por los elevados índices de falta de agua en México, al señalar que entre 12.5 y 15 millones de habitantes no tienen acceso al servicio potable y 30 por ciento de los que sí la reciben no la obtiene con suficiencia ni calidad”, remarcó.
En un punto de acuerdo presentado ante la Comisión Permanente del Congreso de la Unión, la diputada Pérez reconoció que no hay solución fácil ni inmediata para tan alarmante panorama hídrico, pues las presas están muy por debajo de su capacidad, lo que ha orillado a las autoridades a aplicar restricciones al derecho al agua.
Subrayó que la crisis ha alcanzado a la capital del país, en donde se han visto afectadas alcaldías y zonas que nunca antes habían tenido desabasto hídrico, como es el caso de Polanco en la alcaldía Miguel Hidalgo, algunos sectores de Benito Juárez, Álvaro Obregón y Tlalpan, por mencionar algunas.
“La poca disponibilidad de agua es producto de diversos factores de los que destacan la demanda y la mala gestión del líquido vital, circunstancia que está a nada de causar una problemática de proporciones nacionales”, advirtió.
De acuerdo con especialistas del Centro de Ciencias de la Atmósfera, el impacto de la sequía por la que actualmente atraviesa México afecta principalmente a las actividades agropecuarias, pues 76.7 por ciento del agua nacional es destinada a la agricultura y ganadería, mientras que para el consumo humano se destina 14.2 por ciento.
“Es imperante generar acciones a la brevedad, pues el desabasto hídrico ya no es solamente en el norte del país, como usualmente se conocía por las altas temperaturas, sino que la escasez ya golpea a la zona centro e incluso al sur del país”, dijo.
(milenio.com)