» Seis de cada 10 latinoamericanos descontentos con su sistema político

Washington.- Seis de cada 10 latinoamericanos se declararon insatisfechos con sus sistemas políticos, con la proporción de descontento más alta en Colombia y la más baja en Nicaragua, de acuerdo con un sondeo del Centro Pew.

El promedio de insatisfacción en América Latina asciende a 59 por ciento, sólo superado por un nivel de frustración de 61 por ciento en Medio Oriente, mientras que en África es de 50 por ciento y en Asia es de 39 por ciento, el más bajo a nivel mundial.

“La satisfacción política está estrechamente ligada a los puntos de vista de las condiciones económicas nacionales. Los países donde la gente dice que la economía anda mal, es más probable que sean infelices por sus sistemas políticos”, señaló el Centro.

Colombia aparece en el primer lugar de descontento con 75 por ciento, seguido por Brasil con 71 por ciento, Argentina con 68 por ciento y Perú con 62 por ciento, de acuerdo con el sondeo.

México aparece en la lista con un nivel de satisfacción de 40 por ciento y de insatisfacción de 59 por ciento, que corresponde a la media de todos los países latinoamericanos.

Nicaragua es el país con el menor nivel de insatisfacción con 32 por ciento, seguido por El Salvador con 45 por ciento, Chile con 51 y Venezuela con 55 por ciento.

Al mismo tiempo, una mayoría de los ciudadanos latinoamericanos (57 por ciento) considera que los más ricos tienen mayor influencia en sus sistemas políticos.

Colombia, Perú y Brasil encabezan la lista de países cuyos ciudadanos creen que las personas de más altos ingresos son demasiado poderosos, con alrededor de 80 por ciento.

La lista la completan Chile con 76 por ciento, El Salvador con 74 por ciento, México con 68 por ciento, Argentina con 64 por ciento, Nicaragua con 61 por ciento y Venezuela con 44 por ciento, el único país del sondeo con una proporción menor al 50 por ciento.

Sólo África supera a América Latina entre las regiones de mundo donde es abrumadora la percepción popular de que los más ricos tienen un peso desproporcional sobre sus sistemas políticos.

La encuesta fue realizada a lo largo del año pasado y tiene un parte de error de alrededor de menos o más cuatro puntos porcentuales.