» “La gente me preocupa”: sacerdote pide mayor seguridad tras balacera a iglesia de Chihuahua

Tras el enfrentamiento armado que tuvo lugar en la comunidad de Santa Anita, en el municipio de Guachochi, Chihuahua, en el que una persona murió, se incendiaron vehículos y un templo religioso recibió múltiples impactos de bala, el sacerdote de la iglesia de la comunidad lamentó los hechos violentos que se registraron e hizo un llamado a las autoridades durante una entrevista realizada por la comunicadora Azucena Uresti.

El día de ayer elementos de la Secretaría de Seguridad Pública Estatal (SSP), de la Agencia Estatal de Investigaciones (AEI), Guardia Nacional y Policía Municipal, atendieron el reporte de un enfrentamiento armado entre grupos criminales que se registró en una comunidad de Chihuahua.

En dicho suceso la iglesia de la comunidad resultó afectada, pues recibió varios impactos de bala durante el conflicto, al respecto el sacerdote del templo se pronunció diciendo que al acudir al lugar de los hechos se encontró con “un panorama desolador” pues, aseguró, la gente que se quedó en el poblado no puede salir de sus casas por el miedo, no hay donde comprar comida y que incluso los animales de corral se encuentran “abandonados”

Así mismo, el religioso pidió apoyo para que exista presencia de las autoridades en la zona, pues se vive una ola de inseguridad, debido a la cual los habitantes viven con miedo.

El sacerdote compartió que aún no sabe si regresará a la iglesia, pues, al momento, le preocupan más los habitantes de Santa Anita, de los cuales unos decidieron ir a refugiarse en la cabecera municipal y algunos otros con familiares fuera de la zona; sin embargo, otros tantos se quedaron en sus hogares.

“No lo sabemos (refiriéndose a su regreso al templo), lo que me preocupa es la gente que se ha venido a la cabecera municipal, los que se han venido con su familia y los que se han quedado en la comunidad. Cuando fui encontré a tres niños escondidos, estaban solos en su casa y me los traje para ayudarlos”, apuntó el sacerdote durante la entrevista con Uresti.

Aunado a todo lo anterior, el religioso acotó que el suceso no es un hecho aislado y aseguró que la violencia es común en Santa Anita y otras comunidades, por lo cual pidió sea atendido por las autoridades estatales.

“Esto no es algo de ayer, ni de hace unos días, ni semanas, ni meses, es algo que lleva años, por eso quiero que haya presencia de las autoridades”, finalizó.

(milenio.com)