» Los colores de la enfermedad

Esta nota fue creada el lunes, 6 octubre, 2014 a las 6:45 hrs
Sección: La corazonada

La columna de hoy tiene como objetivo informarlos de diversas enfermedades, que han recibido nombres relacionados con algún color.

La mayoría de estos padecimientos fueron titulados por la propia gente y sólo en ocasiones, hemos sido los médicos los que hemos usado un color para identificar alguna enfermedad.

La enfermedad verde o clorosis, es el nombre que recibía la anemia por deficiencia de hierro. Era muy común en México hasta los años 50, cuando se sintetizaron diversos fármacos que contenían este componente fundamental de la hemoglobina, la proteína transportadora de gases que está contenida en los glóbulos rojos. Esto les daba un color verdoso en el rostro y el resto de la piel a los pacientes y de ahí derivó su nombre. En la actualidad ya no vemos los severos grados de anemia que antes del advenimiento de los medicamentos a base de hierro, además haber favorecido una dieta más rica en vegetales verdes.

La fiebre tifoidea y la paratifoidea provocan una erupción rosácea en el pecho y abdomen que es muy característica y dura unas 48 horas. De hecho hay otra enfermedad que recibe precisamente el nombre de Rosácea, de causa desconocida y que afecta crónicamente la piel de quien la padece. Afecta sobre todo la cara y cuello, con intensidad variable y puede acompañarse de inflamación dolorosa sobre todo en la nariz y mejillas. Si nos mantenemos en el mismo color, vale la pena que conozcan también la Roséola, una enfermedad febril, que afecta sobre todo a los niños menores de tres años. En realidad es una enfermedad viral, provocada por el virus herpes humano tipo 6 que ocasiona fiebre de tres días de duración, que culminan en una erupción de la piel (lo que llamamos un exantema) de color rosado, por lo que la enfermedad es conocida como Roséola o Exantema Súbito. El padecimiento es autolimitado, por lo que basta con darle al niño muchos líquidos y controlarle la fiebre con baños de agua tibia, nunca fría y acetaminofén en gotas.

La peste negra o bubónica, provocó millones de muertes en la antigüedad, al grado que estaba prohibido nombrarla en la Edad Media, por la devastación que provocó por toda Europa. Es ocasionada por el contagio de una bacteria Yersinia pestis que es transmitida a los humanos por la picadura de pulgas infectadas. De ahí que la lucha contra las ratas se hizo histórica y motivó novelas, pinturas y obras teatrales. Si bien la bacteria es muy sensible a los antibióticos comunes aplicados por la vía venosa, el retardo en la atención al paciente, de apenas 24 horas, conlleva una mortalidad del 50% aún en los mejores hospitales. La enfermedad sigue vigente, ya que se ven brotes por todo el mundo, si bien los sitios más frecuentes son Asia, África y Sudamérica. En México no se ha descrito un solo caso desde hace más de 70 años.

La peste blanca fue un nombre muy popular de la tuberculosis en el siglo pasado y aunque el nombre ha caído en desuso, la enfermedad se está recrudeciendo, con unos 14 000 nuevos casos en México cada año.

Los niños azules o la enfermedad azul se debe a una cardiopatía congénita en la que hay un defecto cardíaco que permite el paso de sangre venosa hacia la sangre ya oxigenada, por lo que provoca una disminución de la cantidad de sangre que llega al cuerpo. Cuando la hemoglobina se satura de oxígeno adquiere un tono rojo brillante e intenso, pero si se satura al menos la tercera parte de ella con dióxido de carbono, adquiere un tono azul profundo, casi morado. Ese es precisamente el color de estos niños, sobre todo en labios y uñas, por lo que recibe el nombre de cardiopatía cianógena (la que “origina un color azul” literalmente). El tratamiento está encaminado a resolver los defectos congénitos del corazón, lo cual se logra con cirugía o mediante un procedimiento de Cardiología Intervencionista.

La fiebre amarilla es de origen viral, se le ha llamado “la enfermedad del vómito negro”, conocida desde siempre en África, llegó al norte de Sudamérica en el Siglo XVI. No se han descrito casos nativos de México, a partir de 1963 en que la enfermedad fue erradicada de nuestro país, pero en el mundo hay unos 200 000 nuevos casos por año, de los que fallecen el 20%. El virus se transmite principalmente por la picadura del mosquito Aedes aegypti en selvas tropicales lluviosas.

La muerte escarlata es provocada por la inhalación de grandes cantidades de monóxido de carbono, como el que despiden los anafres, por eso seguimos escuchando de muertes de gente humilde en las épocas de frío. Es terrible la paradoja, pero son gente fallecida con un color muy saludable.

La enfermedad de la orina color de cola, es observada cuando hay una obstrucción para eliminar la bilis, que al pasar a la orina, provoca este problema que es llamado “coluria”. También hay un síntoma que define una orina como refresco de naranja, provocado por la presencia de sangre fresca mezclada. Lo llamamos hematuria.

La enfermedad con las evacuaciones negras, es provocada por hemorragias internas del aparato digestivo. El síntoma recibe el nombre de melena pues su origen griego quiere decir “negra” y es ocasionada por la digestión parcial del hierro de la hemoglobina después de la hemorragia interna.

La fiebre escarlata o Escarlatina, ocasionada por los gérmenes llamados estreptococos, es caracterizada por un salpullido en todo el cuerpo, fiebre de hasta 40 grados Celsius y una cefalea muy severa. El tratamiento consiste en antibióticos y tiene una respuesta muy favorable.

La fiebre negra es uno de los nombres que recibe la Leishmaniasis cutánea, conocida también como Kala-Azar y que provoca más de un millón de nuevos casos por año en todo el mundo, de los cuales unos mil se presentan en México, sobre todo en Chiapas, Veracruz y Tabasco, sitios donde es conocida como “úlcera de los chicleros”. Es transmitida por la picadura de mosquitos y su tratamiento sigue siendo un problema muy difícil de resolver, por el pobre efecto benéfico, las recaídas y los efectos indeseables de los medicamentos empleados para su manejo.

Ponerse como canario, con la piel y las conjuntivas amarillas, por múltiples causas de ictericia, es un problema frecuente. La ictericia no es la enfermedad propiamente, ya que el nombre sólo proviene de ikteros “amarillo” y puede ser causado por ruptura de glóbulos rojos como pasa en los recién nacidos sanos, por una inflamación del hígado como las famosas hepatitis virales A y E que se adquieren a través de la boca por agua o alimentos contaminados o la B, C y D por la exposición a sangre, semen o líquidos corporales infectados.

Espero les haya resultado interesante esta columna de colores.

Mail: ricardo.jauregui03@gmail.com

Hasta la próxima.





           



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